En los últimos tiempos he leído un buen número de posts en blogs, artículos de prensa, etc, acerca de lo terrible y dramático que es ser autónomo en España. Artículos, que sin faltar a la verdad, relatan lo negativo de una realidad que yo mismo vivo cada día. Es verdad que vivimos un boom del “emprendimiento”, lo que implica hacerse autónomo como uno de sus pasos, y no todo el mundo está preparado para esa realidad y status administrativo, las cosas como son. Sobre todo aquellas personas que creen que todo son derechos y pocas las obligaciones.
Bienvenido al mundo de la autogestión y del caminar por el alambre, el mundo del autónomo.
Hace ya algún tiempo, en twitter, no recuerdo a santo de qué, dije “algún día escribiré un artículo en el blog rompiendo esta tónica. Yo soy autónomo, y me gusta serlo”, y aquí estoy, dispuesto a cumplir mi palabra y, de paso, darle vida al blog, que llevaba una buena temporada abandonado, y eso no puede ser.
De inicio me gustaría comenzar haciendo un breve resumen de mi recorrido profesional, porque siempre he creído importante opinar con criterio y creo que sobre este tema puedo hacerlo ahora, ¿por qué? Básicamente porque he estado durante un periodo de tiempo consistente en los dos grandes lados del mercado laboral: empleado por cuenta ajena y autónomo, y también he visitado otras zonas de alto riesgo, como ser emprendedor (sic!) o invertir en la compra de acciones de una S.A., por ejemplo, entre otras experiencias laborales y empresariales.
Empezaré diciendo que entré en contacto con el mercado laboral (legalmente) a los 16 años. Mi primer contrato fue con permiso paterno (necesario si quieres trabajar entre los 16 y 18 años de forma legal sin estar emancipado). ¿Cual era mi empleo? Sigue leyendo »